De
pronto, sin motivo:
graznido,
palaciego,
cejijunto,
microbio,
padrenuestro,
dicterio;
seguidos
de: incoloro,
bisiesto,
tegumento,
ecuestre,
Marco Polo,
patizambo,
complejo;
en
pos de: somormujo,
padrillo,
reincidente,
herbívoro,
profuso,
ambidiestro,
relieve;
rodeados
de: Afrodita,
núbil,
huevo, ocarina,
incruento,
rechupete,
diametral,
pelo fuente;
en
medio de: pañales,
Flavio
Lacio, penates,
toronjil,
nigromante,
semibreve,
sevicia;
entre:
cuervo, cornisa,
imberbe,
garabato,
parásito,
almenado,
tarambana,
equilátero;
en
torno de: nefando,
hierofante,
guayabo,
esperpento,
cofrade,
espiral,
mendicante;
mientras
llegan: incólume,
falaz,
ritmo, pegote,
cliptodonte,
resabio,
fuego
fatuo, archivado;
y
se acercan: macabra,
cornamusa,
heresiarca,
sabandija,
señuelo,
artilugio,
epiceno;
en
el mismo momento
que
castálico, envase,
llama
sexo, estertóreo,
zodiacal,
disparate;
junto
a sierpe... ¡no quiero!
Me
resisto. Me niego.
Los
que sigan viniendo
han
de quedarse adentro.Twittear